Artículo de Borja Nebot. Coordinador deportivo y segundo entrenador del ACD Benicense
Las prioridades han cambiado. El 2020 nos ha hecho ver la vida desde otra perspectiva, y la actualidad nos invita a adaptarnos o quedarnos atrás.
El fútbol base celeste gozaba de una buena salud cuando iniciamos marzo. El 11 de
marzo la Directiva del ACD Benicense decide suspender la actividad deportiva del club, y como en todos los demás clubes de España, se inicia un marco de incertidumbre total ante la grave crisis sanitaria. Tocaba ser responsables, cuidarse y quedarse en casa. El deporte pasaba a un segundo plano.
No recuerdo un inicio de temporada igual, el perfilar la temporada 2020 – 2021 a
nivel deportivo ha sido todo un caos. Múltiples reuniones semanales para saber
cómo afrontar las diversas situaciones que se daban, el ir a entrenar fuera de
instalaciones deportivas debido a que estas estaban cerradas y ya había fecha de
inicio de liga para el Primer Equipo, la incertidumbre de los padres de los más
pequeños, las consecuencias económicas en las familias y en todos los estamentos
del club,… Parecía que se pararía todo de nuevo en 2 semanas, y nos vemos ahora,
a finales de año, habiéndonos sabido adaptar y pudiendo competir cada domingo.
Esperemos que el 2021 suponga un partido más asequible de jugar, que no
suponga ningún riesgo para la salud, y que la normalidad deportiva vuelva al “Torre
San Vicente” y a los demás campos de España.
