Ignacio Sanchis / Castellón
La segunda jornada del 17 Torneo Primer Toque Castellón comenzó el sábado a las 9 de la mañana. En clave prebenjamín de 2º Año, el Manises, el Papofut ‘A’, el A.E. Prat y el Colegio Salgui fueron los equipos que inauguraron el día acompañados de sus respectivas aficiones. Sin duda, las aficiones formadas por los familiares de los jugadores se convirtieron en protagonistas de cada uno de los partidos.
En cada encuentro, la grada se dejaba la garganta apoyando a sus jugadores, animaba cuando fallaban, aplaudían cuando acertaban y celebraban cada gol por todo lo alto. Conforme pasaban las horas iban llegando más y más equipos. El recinto empezaba a cobrar color y fueras dónde fueras veías banderas, globos y se escuchaban ‘bocinazos’. Algunos padres se reunían en las mesas del bar mientras que esperaban el partido de sus hijos, otros hablaban con ellos y les daban consejos y el resto simplemente hacían de apoyo.
El plato fuerte llegaría a la tarde. Con la fase de grupos finalizada, daban comienzo las eliminatorias de los dieciseisavos de final entre los segundos clasificados. El Villarreal C.F. fue uno de los equipos que mayor cantidad de espectadores atrajo durante la tarde por dos motivos: la primera tanda de penaltis del torneo (que ganó) y su partido de octavos contra el F.C. Barcelona. Las eliminatorias dejaron encuentros reñidos y otros más descompensados como el F.C. Barcelona 15-1 Villarreal C.F. o el Academia 21/10 0-9 U.D. Levante. La tarde dejó resultados agridulces para algunos como el gol del Valencia en el último minuto para eliminar al C.E. Vila Olímpica o la derrota de la U.E. Cornellà en penaltis contra el E.F. Gavà ‘A.
Al igual que por la mañana, la tensión también estuvo presente durante la soleada tarde. La tensión se elevó en el Gavà ‘A’-U.D. Levante. Un choque que se saldó con victoria para el conjunto catalán pero que para los aficionados ‘granotas’ no fue justo. “Árbitro, les has regalado el partido”, gritaba uno de los aficionados. El colegiado consideró que un jugador del equipo valenciano había cometido una infracción al tocar la pelota con la mano y señaló penalti. El Gavà se adelantó y luego metió la directa logrando el 2-0. Los aficionados del conjunto catalán celebraban cada acción, mientras que los valencianos animaban a los suyos y expresaban su desaprobación con el arbitraje: “¡Qué malo que eres, arbitrucho!”. El gol ‘granota’ llegó de libre directo y la afición enloqueció, pero la alegría duró un suspiro porque el Gavà sentenció nada más sacar de centro.
El día se cerró dejando para el domingo las semifinales, finales y la entrega de premios. El sábado dejó alegrías y disgustos, pero sobre todo dejó fútbol. Lo mejor fue disfrutar de un día entero del deporte rey pasando de partido en partido.