Carlos Gimeno (At. Burriana-Salesianos): «Todo se construye a partir del físico»

Carlos Gimeno Traver es el preparador físico de los equipos Juveniles del Atlético Burriana Salesianos. Precisamente, uno de sus equipos, el B, ha logrado el ascenso a Primera Regional como campeón del Grupo II de Segunda.

– ¿Qué formación y experiencia tienes como preparador físico?
+ Estudié Ciencias de la Actividad Física y el Deporte en la UCAM (Murcia). Mi bagaje en este campo comienza a los 14 años cuando empiezo a dar clases de tenis en el Club de Tenis de Nules, dando a los niños nociones de habilidades motoras y psicomotrices. Cuando llegué a la universidad, me especialicé como preparador físico en la rama de Rendimiento. Los fines de semana volvía a casa y llevaba los grupos de competición. Al terminar la carrera, ya empecé a trabajar allí de pleno como preparador físico y entrenador llevando el seguimiento de los torneos y la planificación de la preparación física. A los 24 años, entré a trabajar en la piscina de Nules, donde también llevaba a deportistas de triatlón y otros atletas, además de las propias clases. También he estado en el CF Nules como preparador físico y rehabilitador. Luego, me fui al Club de Tenis de Vila-real y a este club.

– ¿Cuál es tu labor en los entrenamientos?
+ Mi labor es mantener a los jugadores en el estado de forma máximo que pueda alcanzar cada uno a nivel individual con el menor riesgo posible de lesiones. Que puedan rendir al máximo en cada partido y durante toda la temporada. Para ello, tenemos todo tipo de sesiones.

– ¿Concretamente, ¿qué aspectos se trabajan dependiendo del día de la semana?
+ También depende del momento: si estás en pretemporada, temporada, semana de carga, de descarga, etc. Hacemos lo que se denomina mesociclos. A grosso modo, hacemos el regenerativo dos días después del partido. En una semana normal, el martes haríamos trabajo de fuerza explosiva o fuerza-resistencia y a partir de ahí, un poquito de velocidad y explosividad. Intentamos hacer un poquito de todo sin descuidar la flexibilidad, que la llevamos a rajatabla.

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– Así pues, ¿dirías que la preparación física es un pilar fundamental para el rendimiento de nuestros juveniles?
+ Por supuesto, en el fútbol la fuerza y la resistencia predominan y requiere una preparación física importante. Y más en el fútbol actual, donde sigue habiendo mucho talento, pero el físico tiene una relevancia más alta y requiere preparadores bien formados que transmitan al grupo y sepan trabajar con las cargas adecuadas en los momentos adecuados para que el estado de forma no se convierta en un hándicap. Si el físico no está, todo lo demás queda mermado. Todo se construye a partir del físico: tocarás mejor el balón, harás mejor un repliegue defensivo, una contra rápida, etc.

– En el fútbol base o amateur, ¿cobran ciertas cualidades físicas mayor importancia que otras para aumentar ese rendimiento?
+ No podemos descuidar ninguna cualidad: la velocidad, la resistencia, la flexibilidad… Pero las que cobran mayor importancia son la fuerza y la resistencia.

– Personalmente, ¿crees que en edades más tempranas a esta categoría también es necesaria la preparación física?
+ Rotundamente sí. No se puede pretender llegar a Juvenil y querer empezar a seguir unas pautas. Es una educación que debe estar desde edades tempranas, primero más inducida por el juego con balón y, poco a poco, se puede ir trabajando con más carga, más duración y más intensidad. Pero para llegar a este punto en esta categoría, hay que pasar por toda una serie de etapas para que el cuerpo y el organismo estén preparados para recibir esas cargas.

– Por desgracia, esta temporada tuvimos un incidente que, finalmente y gracias a Dios, quedó en un susto. ¿Opinas que deberían incrementarse las nociones de primeros auxilios en todas las enseñanzas relacionadas con el deporte para evitar males mayores?
+ Fue un susto muy grande. Yo, por desgracia, a nivel de socorrismo acuático, tengo un episodio bastante fuerte a nivel personal y este es uno de los que me siento orgulloso de haber podido colaborar a salvar una vida humana. Debería haber un médico y sino un desfibrilador en todos los campos y todos los que pertenecemos a esta rama deberíamos aprender a utilizarlo. Por suerte, con el título de Entrenador Nacional de Natación y el de Primeros Auxilios tengo nociones de socorrismo terrestre y acuático y por eso puede hacerle el salvamento a Álvaro. Y sí, deberían incrementarse en todas estas enseñanzas. Evidentemente, no vamos a ser médicos, pero esa primera acción de socorrismo es importantísima. En esos primeros 3-4 minutos se pueden producir lesiones graves en el cerebro y pueden quedar secuelas. Si sirve para ser mejor profesional, debería ser así.