La provincia de Castellón se ha convertido en uno de los destinos cicloturistas más completos del Mediterráneo. Un amplio escenario de contrastes paisajísticos y rutas entre los que la comarca de la Plana Baixa, al sur de la provincia, ofrece un terreno privilegiado donde conviven espectaculares paisajes montañosos y rutas costeras ideales para disfrutar sobre dos ruedas. Esta combinación única convierte la zona en un punto de referencia tanto para ciclistas profesionales como para aficionados y familias que desean descubrir la región de forma activa.
Carretera y costa: rutas cicloturistas con vistas al Mediterráneo
Los ciclistas de carretera encuentran en la Plana Baixa un marco idóneo. Las rutas que recorren la costa sur de Castellón permiten disfrutar del mar Mediterráneo en estado puro. Desde Moncofa hasta Burriana, pasando por Nules, los trayectos combinan llanuras perfectas para rodar a buen ritmo con suaves pendientes que añaden variedad al recorrido.
En este contexto, el EuroVelo 8, que atraviesa la comarca de norte a sur, ofrece una oportunidad única para el cicloturismo internacional, conectando a la Plana Baixa con la gran red de rutas europeas.
Desde Vila-real se pueden encontrar otras propuestas de iniciación como la que une la playa y el pie de la Sierra de Espadán, con apenas 240 metros de desnivel a lo largo de 43 kilómetros en los que encontraremos ligeros repechos, pasaremos por el río Mijares además de localidades como Bejís, Vilavella, Nules o Burriana, por tranquilos parajes acompañados constantemente de amplias extensiones de campos de naranjas.
Otra sugerencia para todo tipo de usuarios de la bici es la que tiene como punto de partida Moncofa, con una ruta de alrededor de 41 km prácticamente a nivel del mar. Un trayecto que transcurre en su práctica totalidad a orillas del Mediterráneo en dirección a Xilxes y Almenara, con alguna pequeña tachuela que exigirá en cortos tramos algo más a las piernas, pero que se muestra totalmente accesible y con el atractivo añadido de contar con la compañía de las extensas playas del litoral castellonense.
Asimismo, la cercanía de otros puntos de referencia como la Sierra Calderona, ofrece otras alternativas al ciclista como la que conecta este parque natural con localidades como Almenara. Una ruta escénica que serpentea entre campos de cítricos y pequeños pueblos hasta alcanzar el pie de las montañas, siempre sobre un asfalto en buenas condiciones.
En definitiva, la Plana Baixa se presenta como un destino cicloturista de primer nivel, con opciones para todos los niveles y edades. Desde rutas familiares junto al mar hasta desafíos montaña en plena sierra, la comarca se posiciona como un lugar donde el deporte, el paisaje y la cultura se funden en una experiencia única sobre dos ruedas.
La presente actuación se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, financiado por la Unión Europea-Next Generation-EU. Esta ayuda se incardina en el Componente 14 Inversión 1 del Plan de Recuperación, denominado «Transformación del Modelo Turístico hacia la Sostenibilidad”.
