Conseguir llegar a un equipo de Primera, jugar la Premier y ser internacional con España lo puede hacer un castellonense. Y, además, con inicios en clubs como el CF Rafalafena, cuando con once años jugaba en campos de tierra en Castelló en un club entrenado por su propio padre, Alfonso, y el presidente del club, José Luis del Pino. Así fueron los comienzos de Pablo Hernández, flamante fichaje del CD Castellón. Trabajo, constancia y calidad.
Dos temporadas que sirvieron para dar el salto al club albinegro formando parte de un Cadete de finales del siglo XX que marcó una época dorada en la cantera albinegra. Una generación formada, entre otros, por Pere Soler de mister, Victor González, Juanlu, Javi Troncho, Óscar Basilio , Vicent Garcia, Alberto Casinos, Ramón Vinuesa ,Jorge Corrales,Pablo Hernández , Jesus Pérez y Diego. Un equipazo este Cadete del CD Castellón, tercero en liga y semifinalista de la Copa de España.
Y ocurrió lo propio del fútbol base. Cuando destacas, enseguida el grande viene a por el jugador para que forme parte de su cantera. Así sucedió con el Valencia CF que optó por ceder el jugador al CD Onda (foto) destacando como un jugador muy habilidoso, actuando como extremo derecho, con un uno contra uno muy bueno, gran capacidad de desborde y un magnífico centro. Llegó al conjunto ondense con 18 años y al principio no fue fácil entrar en el once inicial hasta que se ganó el sitio. En la foto, fila de arriba, Alberto Navarro, Pablo Hernández, Fran, Raúl Muñoz, David Pérez, Quique Guillamón y en la fila de abajo, Andoni, Rubén García, Héctor Mohedo, Ramón Debón y Roberto Tomás.
El rodaje, por tanto, en el CF Rafalafena, CD Castellón y CD Onda fue necesario para la progresión de este jugador en su etapa inicial. Luego ya llegaron los focos.