Se juega como se entrena dicen, pero, ¿entrenamos cómo jugamos?

 

Estos días comienzan las temporadas los equipos de La Liga y tenemos en todos los informativos resúmenes de los primeros entrenamientos de pre temporada de los mismos. En los cuales observamos grandes palizas físicas, donde el balón es un elemento accesorio y se elogia el trabajo de los preparadores físicos como el “profe” Ortega por poner el ejemplo de uno de los máximos exponentes de esto.

Ahora bien, esta forma de obrar en los entrenamientos es la aceptada como buena a nivel general, desde la élite hasta el fútbol base, y es por ello que esas mismas imágenes pueden verse en la mayoría de equipos cadetes de cualquier club de la provincia.

Deporte Base

Dicho esto, y sin querer plantear erróneamente que tengo la verdad absoluta, he de decir que quizás ésta no sea la mejor forma de conseguir que un equipo alcance sus objetivos. Es por eso que propongo como alternativa el trabajo desde el prisma de la Periodización Táctica, metodología creada por el profesor Frade, y que pese a no ser muy popular, tiene exponentes de máximo nivel como Pelegrino (entrenador del Leganés), o José Mourinho consiguiendo grandes éxitos en diferentes países.

Esta metodología se basa en que la dimensión táctica condiciona todas las demás, y es por eso que trabajos descontextualizados de lo que es el propio juego no son admitidos, teniendo la especificidad como principio más importante. Es decir, desde la primera tarea hasta la última, el objetivo principal es que el equipo adquiera hábitos, para que estos se manifiesten de forma regular en el partido, consiguiendo así manifestar patrones que potencien el juego del equipo.

Es cierto que desde las metodologías tradicionales se duda de la capacidad de la Periodización táctica para preparar al equipo en todas sus vertientes, pero nada más lejos de la realidad, ya que lo que hacemos es, mediante la especificidad del trabajo en los entrenamientos, conseguir que sean lo más parecidos a lo que va a acontecer o queremos que acontezca en el partido y aunque siempre partiendo de la dimensión táctica, serán también trabajadas a la vez y de forma indivisible las capacidades, física, técnica, psicológica y socio-afectiva.

Es por esto que les acerco esta reflexión, para que todos los entrenadores que estos meses de agosto y septiembre comienzan sus pre temporadas se planteen estas cuestiones y sepan que existe esta metodología más cercana a lo que necesita un deporte colectivo y súper complejo como es el fútbol, ya que el objetivo de todo entrenador es que su equipo manifieste en el campo un modelo de juego pretendido que le acerque a ganar el máximo número de partidos y reduzca el grado de situaciones de azar en el mismo, dándoles a sus jugadores las herramientas para ser mejores, y no hay mejor forma de hacerlo que mediante el entendimiento del juego y entrenamientos lo más cercanos a situaciones reales de partido posibles.

Espero que al menos os haya picado la curiosidad a muchos y pueda seros de ayuda, aunque ya sabéis que la verdad absoluta no existe y menos en un deporte tan complejo y a la vez tan impredecible como éste.

Kevin de Arenas. Joven técnico con experiencia en el CD Castellón y San Pedro CF. La temporada pasada logró el ascenso del San Pedro CF de Primera a Preferente Cadete.

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