¡Qué generación la de los nacidos en 1995! Ellos no fueron los primeros en creer, pero sí los primeros en hacerlo y en que las generaciones venideras pensasen que es posible. En 2007, el Villarreal CF ganaba por primera vez el famoso Torneo de Brunete, que después pasó a denominarse LaLiga Promises y, desde este año, LaLiga FC Futures. Para hacerse una idea del talento que había en aquella generación, una estrella como Pablo Fornals no formaba parte del Alevín A. Con chavales del pueblo como Rubén Fortuño o Sergio Segura y del resto de la provincia, acompañados de algún foráneo como Joel Melgarejo, que venía del Kelme CF, o Juan Ibiza, que llegó hasta el Villarreal B y sigue siendo futbolista profesional, el Villarreal conquistó el mejor torneo alevín del mundo.
Una de las curiosidades de este equipo es que el propio Juan Ibiza, conocido así por ser natural de la isla, fue el primer alevín de la historia de la residencia de Miralcamp, ya que los más jóvenes allí eran de etapa Infantil. Otros jugadores que también llegaron a los principales equipos de la Cantera Grogueta como el eterno capitán Ramón Bueno o Manu Viana también formaron parte de aquel conjunto campeón.
Desde aquel momento, el Submarino se ha alzado dos veces más con un trofeo al que se le ha cogido mucho cariño y que terminó acogiendo tanto en la Ciudad Deportiva Pamesa como en el Estadio de la Cerámica. “Desde entonces, creo que en el club se empezaron a tomar mucho más en serio esta competición. Ya era importante, pero era impensable que se pudiera ganar porque era muy complicado”, confiesa Jorge Peris, entrenador de aquel Alevín A groguet, ahora en el Al-Rayyan de Catar.
Los groguets tuvieron un camino de lo más difícil para ganar el torneo una vez superada la fase de grupos, ya que se enfrentaron al Athletic, FC Barcelona y Sevilla desde los octavos de final hasta las semifinales. Ante el conjunto catalán se liberaron: “Éramos como la Selección Española antes, teníamos una losa con los cuartos de final en este tipo de torneos y decidimos ir a por ellos en lugar de esperar atrás. Nos pusimos 2-0 arriba y, como los partidos eran cortos, defendimos bien el resultado”, explica Peris esbozando una sonrisa. Y, en las semifinales, también reinó la épica: “Íbamos perdiendo 1-0 porque estábamos muy cansados del partido contra el Barça, pero al final logramos empatar y fuimos a los penaltis. Era una tanda de tres. Fallamos el primero y ellos marcaron, pero luego fallaron los dos siguientes y pasamos a la final”, señala el técnico burrianense.
El Villarreal se plantaba en la final del gran torneo tras haber perdido el campeonato liguero contra un Valencia que no perdonó. “Solo perdimos un partido contra ellos allí y empatamos aquí cuando íbamos ganando 2-0”, relata el ex técnico groguet. Allí jugaban futuros futbolistas como Gayà, Salva Ruiz o Grimaldo. No obstante, cedieron en el Brunete contra el finalista, la Real Sociedad.
El Villarreal de Jorge Peris arroyó con un contundente 4-1 a la Real Sociedad de Álvaro Odriozola, que se perdió la gran final por lesión, pero en las que había otras futuras estrellas del balompié como Jon Bautista, Jon Guridi, Martín Marquelanz, Luca Sangalli o Unai López.
Allí, no pudo estar presente José Manuel Llaneza porque la gran final coincidía con el ascenso de categoría del Villarreal B, pero sí una representación de la directiva del club que vio cómo empezaba a dar frutos el gran trabajo de la Cantera Grogueta.
