Tras conquistar la Europa League, el equipo de Emery mira con gran entusiasmo a una próxima temporada en la que intentará ganar la Supercopa de Europa, pelear en la Champions y por entrar entre los cuatro mejores de LaLiga Santander.
El camino hacia el éxito es una senda difícil de tomar, pero que una vez conocida se puede repetir con cierta frecuencia. Precisamente eso es lo que espera conseguir un Villarreal que tras su conquista de la Europa League, su primer título profesional, intentará no quedarse atrás y seguir mejorando su palmarés.
Para ello va a tener una bala inmejorable en la Supercopa de Europa 2021 contra el Chelsea. Esta es una competición claramente dominada por los equipos españoles, que poseen 15 títulos en total, por los nueve de Italia o los ocho de Inglaterra, lo que da esperanzas a los amarillos de seguir ampliando horizontes.
Además, lejos de lo que pueda parecer en la desigualdad entre el campeón de la Champions League y el de la Europa League, la final suele ser muy igualada, las tres últimas necesitaron de la prórroga para definirse, y en la del 2018 fue el Atlético de Madrid el que se impuso pese a que el Real Madrid era el vencedor de la anterior Orejona.
Más expectativas después de la Supercopa
A partir de ahí, la próxima será una temporada para disfrutar por parte del conjunto castellonense, que intentará mantener el grueso de su bloque formado el pasado verano para así dar una continuidad necesaria al proyecto. Emery volverá a tener las riendas de un equipo cuya aspiración pasa por tener un papel destacable en la Champions y en LaLiga Santander, competición en la que sus apuestas de fútbol no le sitúan entre los cuatro mejores, pero sí entre los candidatos a sacar de esas posiciones al Sevilla, Madrid, Atleti o FC Barcelona.
En la competición continental ya parece un éxito superar la fase de grupos y clasificarse una vez más a las eliminatorias por el título. Ese hecho implicaría un crecimiento absoluto del proyecto del Villarreal, además de una demostración de que el conjunto español puede estar entre los mejores del continente.
Mientras que en LaLiga, además de su pelea ante equipos como la Real Sociedad o el Real Betis Balompié, con los que ya luchó el pasado curso, se le plantea la posibilidad de intentar igualarse a un Sevilla que en los últimos años sí que ha estado por encima de él.
Todo ello con los mismos esquemas lógicos que tradicionalmente han llevado a la entidad a triunfar, como son una política de fichajes y ventas muy controlada y sin hacer locuras, una plantilla muy competitiva y un entrenador que sabe cómo sacar un rendimiento absoluto a jugadores clave como Gerard Moreno, Pau Torres, Raúl Albiol o Alfonso Pedraza.
En definitiva, el Villarreal no quiere detenerse en la consecución de la Europa League y tras ese primer éxito en su palmarés espera estar entre los equipos destacados de la temporada para demostrar ese crecimiento que siempre marca como gran objetivo para cada campaña. Y a partir de ahí, si es posible el levantar algún título más, mejor todavía.
